Un almuerzo entre amigos, recuerdos y sueños.

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Llevaba tiempo planeándolo, dándole vueltas a la idea. Un lunes se levanto decidido; ¡Este sábado será el almuerzo con todos mis amigos!

Cuando a Jose, se le metía algo entre ceja y ceja, no paraba hasta lograrlo. Envío mensajes de texto y por Whatsapp, emails, hizo llamadas telefónicas. Se comunico con amigos en Paris, Barcelona, New Jersey, Hialeah, Canadá, Bruselas, Suecia y un montón de países y ciudades más. Armó un arroz con mango de anjá, pero estaba resuelto, esta reunión de amigos en el patio de la casa de Alfredo y The little Jose, seria histórica.

A todos los amigos les dijo bien claro que cada uno tendría que llevar un plato especial, algo que le gustara y que estuviera vinculado a su vida, a sus recuerdos. Todos pasaron la semana en los preparativos, algunos sacando pasajes y haciendo reservaciones en hoteles, mientras pensaban en que plato llevar a la reunión, otros buscando ingredientes, alistándose para el esperado almuerzo.

Jose, llamo a su mamá en La Habana para pedirle consejo.
– Haz un picadillo con pasitas, aceitunas y papitas picadas en cuadritos fritas, de postre un flan con mi receta personal, recuerda no agregarle azúcar, con la de la leche condensada basta.
– Gracias mami, un besote, te llamo el domingo para contarte del almuerzo.

Hiram, no se preocupo mucho, compró 4 paquetes de chuletas de puerco en Publix. No quiso complicarse, después se decidió por hacer un potaje de garbanzos de esos que él hacia imitando la sazón de Concha, la mamá de Jose. Recordó la primera vez que lo probó y le supo a gloria.

María de Jesús, preparo una ensalada sueca idéntica a esa que hizo el día de su cumpleaños en el 2011, cuando conoció a Jose e Hiram y juntos comenzaron a “cocinar” su primera presentación ante el público de Miami.

Higinio, pidió la ayuda de su mamá, juntos hicieron una fuente enorme con croquetas idénticas a las que hacia María Elena en La Habana, cuando él y su hermano eran niños. Esas croquetas sirvieron, en su momento, para mucho más que servirlas en la mesa. Hacerlas juntos los hizo revivir esos años en que, enfrentaron dificultades y las vencieron.

Así todos pasaron la semana ocupados en los preparativos, muchos guardaban celosamente el secreto sobre el plato que llevarían; no querían competencia, querían deslumbrar a los demás cuando mostraran su plato.

Llego la tarde del sábado. Jose, fue el primero en llegar a casa de Alfredo y Little Jose, fue directo al patio. Una mesa enorme ocupaba casi toda el área, coloco su fuente con el picadillo que su mamá le habia enseñado a cocinar sobre la mesa y guardo su flan en el refrigerador, lo sacaría a la hora de los postres. De uno en uno, en grupos de 2 o de 3 fueron llegando todos. No faltó nadie.

Lourdes trajo una cazuela enorme con un delicioso arroz con pollo, al destaparlo, un fuerte olor a barrio habanero, a comida del domingo en familia, inundo el patio. Todos se quedaron en silencio, disfrutando ese olor que los transportaba a La Habana y a otros tiempos. Montse, vino directo del aeropuerto, traía una tina de helado de mandarina y una cazuela con fabada, sabia que era uno de los platos obligados que Jose pedía a su mamá en sus viajes a La Habana, lo coloco sobre la mesa, lo destapo.
– Pruébalo Jose, dime si te recuerda algo.
– Parece que lo hizo mami, ¿Como lo lograste?
– La llame, ella me dijo como hacerlo, quería sorprenderte.
Se dieron un abrazo largo e intenso, un abrazo que se debían hacia años, esperado y necesario, imprescindible.

Samuel llego, puso sobre la mesa una fuente con jamón ibérico y corrió a bajar el piano eléctrico del auto, después del almuerzo cantaría algunas canciones junto a otros invitados y los acompañaría al piano. María de Jesús e Hiram, llegaron juntos, colocaron sus platos sobre la mesa y se pusieron a conversar con Samuel, planificando la sobremesa musical.

Margarita llego agitando pulseras y riendo a carcajadas, destapo su cazuela de caldo gallego antes de ponerla en la mesa.
– Huelan esto, me quedo especial.
Todos se deleitaron en ese olor, se extasiaron en recuerdos e historias convocadas a su influjo. Jose, viajo en el tiempo en alas de ese olor, recordó cuando su mamá lo hacia allá en La Habana, se lo daba a probar y él solo decía; ¡Exquisito!

Sobre la mesa había una variedad de platos capaz de satisfacer al gusto más exigente. En el patio una mezcla de olores revivían infancias y hogares, nostalgias y alegrías. Magda llego con las primitas recién estrenadas, cada una traía algo, pastas, papas rellenas, mermelada de guayaba, ella cargaba orgullosa y nostálgica una fuente con frituras de malanga. Jose, no pudo resistirse y cogio una.
– En mi primer almuerzo en La Habana, cada vez que voy, mami me hace frituras de malanga, este sabor me trae la alegría del encuentro, de sus besos, vuelvo a sentir la felicidad de ese momento. Sus lágrimas cayeron sobre la fritura de malanga dándole un gusto especial, un toque mágico.

Daniela y Mirka llegaron juntas, ambas traían una cazuela enorme con tamal en cazuela, pesaba tanto que tuvieron que pedir ayuda para ponerla en la mesa.

– Jose dale ayúdanos, para algo tiene que servirte hacer pesas todos los días.
Entre Jose y Javier levantaron la enorme cazuela, mientras Luis, hacia espacio en la mesa para ella.

Bárbara, llego con su hijo, orgullosa y feliz, traían una fuente inmensa de spaghetti, idénticos a esos que vendían en la esquina de Tejas cuando estudiaba en la secundaria. Puso la bandeja en la mesa, abrazo a Jose.
– Créeme que volví a ser adolescente mientras los hacia, cuando los pruebe, sentiré la risa y las voces de mis amigos de esos tiempos, volveré a andar por la esquina de Tejas.

Jorge, se apareció con una fuente enorme de frijoles negros y un montón de flautas de pan cubano recién horneado. Coloco todo sobre la mesa, abrazo a sus amigos.
– Que trabajo me costo decidirme, no sabia que hacer, toda la comida cubana me recuerda a nuestra islita, saben que yo extraño a Cuba y ustedes ¡también!

Miriam, se apareció con unas judías fritas, Jose se extasío mirándolas.
– Si supieras, mami acostumbraba a hacerlas, hija de españoles, crecimos comiendo fabadas, muñetas, garbanzos fritos y caldos gallegos, ¡Cuantos recuerdos! Gracias, se ve muy rica.

Gino, contradictorio y ocurrente, trajo una fuente de tostones. Gabriela, Carlitos y Henry, se pusieron de acuerdo y llevaron arepas y hayacas. En un intento de traerse su Venezuela a Miami y compartirla con nosotros. Iliana, trajo una cazuela con moros y una fuente con fricase de guanajo, tal y como su abuela lo hacia. Mirta se apareció con una cazuela de arroz blanco y una fuente con huevos fritos.
– No traje el picadillo porque sabía que tú ibas a hacerlo, hoy voy a darme banquete. Como saques un batido de proteínas, ¡Te mato!
Todos rieron, seguros que esa tarde nadie calcularía calorías y todos olvidarían las dietas.

La Fornés, llego con Robertico y Colina, traía una fuente con colas de langosta.
– Cada vez que me he presentado en The Place, es el plato que me han ofrecido, me recuerda mi reencuentro con mi público fiel, mis amigos, los aplausos de Miami.

Higinio, llego con su mamá, Albert, su hija y María Antonieta, todos lo ayudaron a freír la barbaridad de croquetas que habían preparado.

Joaquín, se bajo del taxi todo sudado y agitado.
– Termine una conferencia y cogi el avión directo para Miami, solo tuve tiempo de pasar por “El palacio de los jugos” y comprar unos tamales. Ya se que jamás son como los de Cuba, pero todos dicen que son los que mas se les parecen.

Guille, Gabriel, Deiss, Charisse, Alfredo, Radel, Esperanza, Ariel, Tania, Bris, todos fueron llegando y colocando sus platos especiales sobre la mesa. Todos aportaron su plato y sus recuerdos a esa reunión de amigos.

Kleber, llevo carne e’ puerco preparada por él y su mamá. Haciendo gala del titulo que Jose le había dado, de ser el más cubano de todos los ecuatorianos conocidos.

Jose, saludo a todos, a muchos los conocía solo por la magia de la Internet. Allí estaban Tony, Fregny, Zenaida, Lissete y un montón más de amigos, ninguno falto a la cita.

Antes de comenzar el esperado almuerzo, todos se tomaron las manos alrededor de la mesa, disfrutaron esas mezclas de olores que los hermanaba en el pasado y aseguraba el futuro. Sobre la mesa, había fuentes con moros, cazuelas de potajes, negros, colorados, garbanzos, judías, carnes de todos tipo, cocinadas de casi todas la maneras posibles, arroz blanco, amarillo, frito, ensaladas, tamales, chicharrones de puerco, croquetas, papas rellenas, mariquitas, un montón de postres, desde torrejas hasta buñuelos. El enorme patio de la casa resulto pequeño de pronto, al influjo de olores y sabores, madres, abuelas, tías y hermanas ausentes, se hicieron presentes, fue una fiesta de recuerdos y sueños. Por unos minutos vivimos sin ausencias, sin partidas ni lejanías. Todos quisieron compartir ese almuerzo especial que más que una fiesta del paladar, se convertía en un torbellino de recuerdos, una celebración de momentos especiales, una fiesta de sentimientos que multiplicaba la alegría y la vida.

Comenzaron a comer entre lágrimas y sonrisas, abrazos y besos. Sonreían a la vida, olvidaron problemas, cuentas por pagar, asuntos pendientes. Compartir entre amigos y recuerdos, con ausentes y presentes, tener a lo mejor de nosotros al alcance de la mano y disfrutarlo entre hermanos, hace crecer la felicidad, ensancha pechos y adelanta mañanas con arco iris y carcajadas resonando estrepitosamente en el Caribe, multiplicadas en cada rincón de nuestra Islita.

Sin dudas ninguno olvidaría este almuerzo especial entre amigos, recuerdos y sueños. Un almuerzo así, alimenta mas el alma que el cuerpo, todos lo sabían. Mientras disfrutaban de las canciones de los artistas presentes, acordaron repetir la reunión cada año, seguros que alguna vez, el almuerzo seria en La Habana, tal vez en la Plaza Vieja, con banderas al aire y palomas volando. Todos sabían que ese almuerzo, llegaría, seguro y necesario.

25 thoughts on “Un almuerzo entre amigos, recuerdos y sueños.

  1. Más que un almuerzo ha sido un banquete, un banquete en honor a tu prosa!
    Gracias por dedicarle todo un párrafo a mis spaguettis “tipo Esquina de Tejas”, gracias por incluir a mi hijo, a quien tanto le gustan, gracias en nombre de todos los comensales y en el mío propio…
    Un fuerte abrazo y muchos éxitos!!

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  2. oye y mira que todo quedo sabroso .. pero para la proxima hago el arroz con leche del bueno del que yo se hacer y esta vez si con bastante leche de coco jajaj

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  3. Graciassss. Lo lei dos veces y me lo pude imaginar. Me encanto que me incluyeras con Mirka y la cazuela del tamal. Este escrito es de historia, mañana lo comparto con todo el que conozca. Te pasaste !!!!

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  4. Que rico poder compartir así!!!, me alegro x ti y amistades, recordé los almuerzos en familia q hacíamos en casa de mi abuela,felicidades x tu escrito

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  5. Me enamoré de tu mesa “sueca”…bueno, cubana…de la cultura, la magia y la luz que tu mesa proyecta…pero sobre todo de tu capacidad para ir recogiendo amigos por el camino y guardándolos en una cajita de cristal…y nos vas acomodando a todos cuidadosamente en su interior de terciopelo junto a una porción de tu corazón que “alimentas con pasión” …y así vas intentando que no se raye nunca tu cajita…Gracias por mi ensalada sueca José! y gracias por brindarme un puesto en tu mesa.

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  6. Me he quedado sin palabras solo decirteq a mi mente vinieron tantos recuerdos . Me has echo llorar y m ha venido a mi mente como especie de un flash cuando terminaba de almorzar q me daba mi abuela y me mandaba a dormir la siesta y yo m dormía con el ruido de la calle y hasta me acuerdo el olor de mi calle y lo que sentía cuando el viento m daba en mi cara.Felicidades por tan lindo escrito y esperó ver muchos mas

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  7. Un millon de abrazos!!!!
    Gracias mi amigo, por incluirme a mi, y a los mios, con nuestras infaltables hayacas y arepas… es nuestra ofrenda humilde a esta Hermosa reunion de amigos!
    Como imagino que ya sabes, ando por aqui mismito, en DC, vine en busqueda del otono para llevarmelo por las grenas para Florida, pero no imaginas mi sorpresa, mis lagrimas y mi enorme gusto por saberme participe de esa fiesta hispano-americana, fiesta que espero mas pronto de lo planificado se materialice, y puedes contar que alli estaremos!!
    Gracias Corazon, nunca dejas de sorprenderme!
    Abrazos infinitos, desde la Capital de este Gran Pais!
    Gabby

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  8. Mi hermano, sera que hoy era el dia para leerlo, un dia para mialgo dificil, recuperandome ya de un mal dia. Hemos llorado , como ninos, me aferre a mi mama y juntos recoerdamos esos viejos tiempos. Pero que bien , que bien, al menos tuve un gran almuerzo. !!!!!!!

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