Me fui.

Me fui, cansado de noches sin luz, de te toca o no hay, ponte en fila, callate; me cansé del hambre de pan y libertad y me fui.

Me cansé de tragarme palabras y discursos, de inventar aplausos y llorar por dentro.

Me fui, obstinado de mentiras, de promesas falsas, de metas imposibles y sueños rotos.

Me inventé alas una tarde de abril y alcé vuelo, tan alto que el vértigo murió.

Me fui y me di luz y hablé alto, sin trabas, ni miradas amenazantes, no hubo más no hay, no te toca, ni discursos y promesas, saboreé libertades y estrené derechos .

Marqué, para siempre, en la fila del futuro y las conquistas y con Cuba en el alma y un puñao de tierra en mi pecho me armé de sueños y de fuerzas.

Me fui y algo mío quedó allá al sur, preparando el camino del regreso, aguardandome.

Fotografía de una obra del pintor cubano radicado en Miami, Feliz Gonzalez Sanchez.

Volver ¿a dónde?

Hay voces que reclaman regresos, recuerdos que hacen trampas,

me dicen vuelve, volver a

dónde, no me esperan mi madre, mis hermanas.
La casa esta habitada por fantasmas que tratan de salvarse del olvido .
Hay amigos y reuniones por hacer y temo ese perderme

, sin brazos

que me esperen.
Hay calles que reclaman mis pasos,

rincones de la ciudad

que esperan mi regreso,

hay recuerdos

que se aferran a la memoria, se niegan a morir.
Ceibas centenarias, girasoles me indican el camino del regreso. No temas al reencuentro me susurran, la ciudad está lista, no demores.
Sigo temiendo al viaje de regreso, a perderme en esas calles que conozco, a andar como un fantasma entre recuerdos, a perderme, para siempre, buscando los brazos de mi madre.
Tal vez soy un fantasma más buscando sus raíces, debo volver, aunque sea una vez, gritar su nombre en cada esquina de la vida y traerme conmigo la esencia de mi vida.

Fotografía tomada de Google

¿Donde será la próxima masacre?

Volvemos a oraciones por los muertos, no movemos en círculo, sin soluciones. Cada vez que alguien con una de esas terribles armas de asalto, a las que hasta la policía teme, decide cobrar vidas y vestir de luto al país y a hogares, los políticos oran y envían sus pensamientos. Hasta en la pasada convención de la NRA no faltó quien dijera, entre aplausos, que las masacres ocurrían porque las oraciones no eran suficientes, si el tema no fuera tan serio parecería una comedia, una burla.

La 2da enmienda da derecho a portar armas, pero se impone regular que tipo de armas se pueden portar, un AR-15 no es un arma para defenderse, es un arma de asalto y nada justifica su venta, absolutamente nada.

Muchos políticos tienen las manos y la conciencia manchadas de sangre, aceptan dinero de la NRA para sus campañas políticas y se oponen a regulaciones y control sobre la venta de armas. No señores, esto no se debe a enfermos mentales, en todos los países existen enfermos mentales y este es el único en el que ocurren estas masacres; son causa directa de la venta incontrolada de armas. ¿cómo es posible que un joven tres días después de cumplir 18 años pueda comprar 2 AR-15? Basta de discursos, de minutos de silencio y oraciones que no detienen balas.

El espanto de esos niños, estremece conciencias y los cimientos de este país. Una niña de 10 años se cubrió con la sangre de otro niño muerto y se hizo pasar por muerta para evitar la muerte real, si a usted eso no le estremece, algo anda mal, creame.

A grandes males, grandes remedios, está en juego el futuro de este país, la vida. No podemos vivir con el temor de quien será la próxima víctima, no podemos cruzarnos de brazos y voltear el rostro. Muchos, los mismos que fueron capaces de politizar el uso de mascarillas, piden que no se politice esta masacres, no es política señores es ser realmente pro vida, de apostar por el futuro y no por la muerte.

Andan muy preocupados por el aborto, son pro vida dicen, pero contemplan impasibles las muertes de niños, como si los que ya nacieron no importaran. Basta de hipocresía, basta de palabrería; el momento exige acciones .

Debemos salvar el futuro o resignarnos a verlo morir ante nosotros.

Lourdes Libertad en concierto de cumpleaños artistico.

Lourdes Libertad cumple 42 años de su debut escénico y decide celebrarlo entre amigos, de pie en un escenario. Cumpleaños sui generis donde la homenajeada es quien regala canciones, arte y talento. Siempre decimos que la última entrega de un artista es la mejor, a mi entender, este concierto de anoche esta, sin dudas, entre los mejores; muy bien concebido de principio a fin, excelente selección de canciones e invitados especiales que ayudaron a redondear una noche perfecta.

Lourdita comienza con Sobreviviré y eso lo sabemos todos, no hay tormenta capaz de vencerla, puede sobrevivir a todo, seguirá en los escenarios, entre aplausos y bravos.

En su acertada selección de canciones están presentes Meme Solis y Lazaro Horta, entre otros. A pesar de incluir versiones de números del repertorio internacional, sus cartas de triunfo se afianzan en su cubania, en ese nutrirse de su tierra y traernos al escenario palmeras, sinsontes, girasoles que en su voz convierten a Alfaro’s en un sitio habanero, como si los amigos nos hubiéramos reunido a escucharla, a la sombra de una ceiba.

Lourdita invitó a su concierto a Roberto Palacios, más conocido por ” la globos” en las noches de Miami quien aportó un momento de buen humor a la noche. Mención especial merece Maylu Hernandez a quien solo conocía en el mundo virtual, confieso que nunca la había visto actuar en vivo y me ganó, para siempre, en una suerte de amor a primera vista, sigamosla de cerca, organizadores de espectáculos y público, tiene un potencial extraordinario y nos merecemos disfrutarla a plenitud.

Maylu y Lourdita se unen en un dúo, bastan sus voces y presencia para saber que los días felices están de nuevo aquí.

Cierra el concierto con un poupurrit de la Lourdes mayor, Lourdes Torres, desde la gloria, donde habita, aplaude feliz y arropa su voz, le da la nota exacta, vive en su entrega.

Entre el público un grupo de artistas que no quisieron perder la ocasión de apoyar y disfrutar a Lourdita, entre ellos Mirtha Medina con quien ha compartido escenarios y amistad y Bernardo Lichilin que nos sorprende con su presencia y afecto.

La noche termina y queda el recuerdo especial del disfrute, de haber asistido a uno de los mejores conciertos ofrecidos en el escenario de Alfaro’s, un lugar especial en la geografía cultural de Miami donde se presentan artistas cubanos, un riconcito cubano en el corazón de Miami.

Gracias Lourdita por tu arte, por tu darte al público en cada entrega, por mantenerte en escena para suerte nuestra, por sobrevivir a todo y seguir, sin bajar la cabeza, segura de exitos y aplausos.

Entre traidores anda el juego.

Entre traidores anda el juego y los insultos llueven, abundantes e inoportunos.

Allá y acá padecemos del mal de atacar a todo el que no piense igual, de querer destrozar a dentelladas a todo el que se atreva a pensar diferente, a pensar por sí mismo.

Todo aquel que ose pensar por sí mismo, desgajarse del rebaño, decir no estoy de acuerdo, se busca tremenda salación; un, eres tremendo comemierda o tú estas equivocado o eres un traidor, pretende frenarlo en seco.

Donde quiera que estemos pretendemos reeditar la unanimidad, amamos los robots que obedecen sin objeciones, que siguen orientaciones de arriba ciegamente, obedientes y dóciles. Si Luis Alberto Montaner se atreve a criticar a Trump, allá van a despedazarlo, ¡estas equivocado! le gritan, vergüenza del exilio cubano, le dicen otros. El que hasta ayer era orgullo de muchos, ahora es tremendo comemierda por no sumarse a la comparsa proTrump, así andamos o mal andamos ¿seremos capaces algún día, de este lado del mar, de aprender que la unanimidad es imposible y que el que piensa diferente merece atención y respeto?

Si allá, al otro lado del mar, ven una foto de Leoni Torres con Willy Chirino, le gritan traidor y cuando anuncia una canción en la que unirán voces y talentos, cubren sus cabezas con cenizas espantados de tanta osadía. Lo que debería ser un motivo de orgullo y fiesta de la cultura cubana, se convierte en el objetivo de ataque. Willy Chirino no tiene sus manos manchadas de sangre, no ha financiado bombas, no ha ordenado fusilamientos, sólo, como muchos, no está de acuerdo con el gobierno cubano. Cubano de pura cepa, busca a otro cubano y en ese abrazo de las dos orillas, más allá de ideologías y fanatismos, esta el orgullo de ser cubano. Entendamos de una vez y por todas, que Cuba no es un partido, no es un gobierno.

Muchos que gastan tinta y voces en criticar a Leoni Torres, las ahorran para preguntar por la suerte de Luis Manuel Otero Alcántara. Hubiera sido hermoso que esos que hoy llaman traidor a Leoni Torres, aunque no compartieran las ideas de Luis Manuel, se preocuparan por él, apoyaran su pensar diferente, aunque no lo aplaudieran, pero no, es mucho pedir y en un chapoleteo constante dicen amar libertades, mientras las reprimen.

Entre traidores anda el juego, porque al final la Patria es la traicionada, la que espera, impaciente, ser “de todos y para el bien de todos”.

Fotografía tomada de Google

Lourdes Libertad, desafía la tormenta.

Lourdes Libertad en concierto y en Alfaros, una noche de sábado que por esas deliciosas coincidencias de la vida, estoy libre. La tentación y las ganas de disfrutar una noche cubana entre amigos, pudieron más que los temores por la pandemia. Así, entre amigos, disfruté mi primera salida a un lugar público, en tiempos de pandemia.

Lourdita, puntual, asiste a la cita con su público, disfruta esos aplausos que la reciben. Es su reencuentro con el público, sin ustedes no soy nadie, dice emocionada y feliz, mientras se entrega en notas y agudos, entre aplausos. Desafía la tormenta, sabe que volverán tiempos mejores y aporta voz y arte en el empeño.

Poco a poco, como quien reparte regalos entre amigos, entrega canciones y va transformando el lugar en un parque habanero o lo hace Malecón o calle, solar o barrio. Pablito asiste al concierto y el breve espacio en que no estas, se hace inmenso. Es noche de magias y reencuentros.

Un momento especial, cuando Miami Latino le entrega una placa de reconocimiento por sus 40 años de vida artistica. Aunque creo son más, si recordamos que siendo un bebé hizo televisión; es toda una vida dedicada al arte, al arte que recibió al nacer de su madre, Lourdes Torres.

Las madres no podían faltar a este concierto, no se perdonarian esa ausencia. Canta de Lia, Todo pasa menos tú y Lourdita y yo sabemos que entre notas, mami me acaricia la frente y susurra a mi oído: aquí estoy, como siempre. Estrena, en su voz, una canción de Lourdes Torres, es noche de madres arropando recuerdos, iluminando rutas.

Rinde homenaje a algunas mujeres que ella llama, tremendas. Farah, en su voz vuelve a hacer su largo viaje, entre recuerdos y voces. No falta nuestra Rosita, sin un reproche la evoca y trae al escenario, eterna e inmensa, nuestra Rosa sin final. De Moraima, recrea su Perdóname conciencia y desde un rincón del escenario, la mora aplaude, presente y feliz.

Lo pronostiqué cuando hablé de este concierto en Facebook, sería una noche cubana en el corazón de Miami y entre notas y armonías, la Habana, Cuba, asiste y aplaude feliz, de saberse inmensa, de ser Patria y vida a la vez.

Se despide de su público que le pide, insistente, otra, otra y regala una más, como el mago del cuento que no se cansa de sorprendernos y siempre tiene un As en su sombrero.

La noche termina y regreso a casa feliz. Le debo a Lourdita dedicarle y firmarle mi libro, ella me debe, por siempre, canciones, abrazos y próximos encuentros.

Fe, Esperanza y Caridad, tres viejas amigas.

Ellas se reunían una vez al año, desde un 1ro de enero perdido en el tiempo y la historia, cuando se conocieron entre alegrías, promesas y discursos.
Atrás habían quedado su juventud y sus sueños, los discursos y las promesas. Fe, Esperanza y Caridad se negaban a desmemorias y se aferraban a recuerdos, repetían una y mil veces la historia de sus vidas.
– Esperanza, ¿te acuerdas cuando fuimos a alfabetizar? Nunca nos habíamos separado de nuestros padres y una noche estábamos durmiendo en un bohio en medio del campo, por suerte estábamos cerca y podíamos reunirnos y darnos ánimo.

– Claro que me acuerdo Fe, fue la primera vez que me bañé con agua fría con una latica y un cubo, mirando las estrellas.

– Esos fueron los mejores tiempos. Nuestros sueños estaban intactos. Confiabamos en el futuro, la revolución, aplaudíamos discursos, repetíamos consignas.

– Ay Esperanza, de esos tiempo sólo nos quedan los recuerdos. A ellos me aferro, si los pierdo, me muero de pena.

– Los recuerdos son del carajo, a veces se aparecen y nos dan una una bofetada. Cada vez que recuerdo que le dejé de hablar a mi hermana cuando me dijo que se iba del país, aquel, ¡olvídate que yo existo! Aún me duele.

– Ay Caridad, menos mal que tu hermana no te hizo caso, gracias a ella puedes comprar en las tiendas y no te faltan medicinas y el café Bustelo. ¿Quién nos iba a decir que íbamos a sobrevivir gracias a los familiares que se fueron del país?

– ¿Se acuerdan cuando el Mariel? Fe vino a verme asustada y confundida de tantos gritos, tantos golpes, ahí empezaron a romperse muchos sueños. Hice café y le dije: las ideas no se defienden con gritos, ni dando golpes, se demuestran, se convence a la gente, no es más fuerte el que grita más alto, ni le asiste la razón al que intimida. Fe lloraba y yo apenas la podía consolar, no sabía como. Ay Esperanza tú siemore que nos reuníamos nos hablabas del futuro, de sueños, cuando tus hijos se fueron del país buscando una mejor vida, tu esperanza era verlos pronto.

– Así es mi santa, las esperanzas se nos fueron apagando, la fe en lo que creíamos disminuía y terminamos viviendo de la caridad de los que se fueron. ¿Quién nos lo iba a decir?

Memorias y ausencias

Traté de prepararme para esta ausencia y multipliqué besos, abrazos, inventé palabras y piropos.

Te atrapé en fotos y memorias, atesoro tus palabras de amor, tu desvelo, tu decir: todo estará bien, tu fe ciega en la bondad, en mí.

Hoy te abrazo en el recuerdo, te escucho en la memoria, recreo tu imagen, revivo instantes.

Sabes, no te has ido del todo, aunque habitas en la gloria y eres luz, sigues aquí, conmigo. Atrapada para siempre en mis recuerdos, inmortal, incansable, alentándome, haciendo realidad, uno a uno, mis sueños, mis intentos.